El hotel es pequeñito y muy acogedor. La habitación espectacular, me ha encantado todo, el baño, el balconcito, y nosotros fuimos con un bebe y nos pusieron una cuna y todo. La recepcion con la botella de cava y las tabletas de chocolate , un detallazo. Y el que tenga parking es un superplus. Tuvimos un percance con la cuna, mi hijo zarandeó las varillas y partió una, hable con la chica por si tenia que pagar los daños y fue muy comprensiva y no pagamos nada.